domingo, 23 de enero de 2011

¿Qué alimenta el Amor?

Temas relacionados:

Conócete a ti mismo
Es un frase de Sócrates que es una premisa importante en el Amor. Es fundamentalmente amarnos a nosotros mismos. Es decir, primero hay que conocerse, amarse, entenderse. Saber ¿quién soy yo?, ¿cuáles son mis características?, ¿cuál es mi búsqueda?, ¿hacia donde voy?, ¿qué quiero en la vida?.

Y, partiendo de la valoración del sentido de mi vida, tengo que darme cuenta si ese sentido de la vida es afín con la otra persona. Porque si yo, por ejemplo, quiero ser un filósofo o una persona que lee, estudia, reflexiona, que no es superficial, que le gusta Platón, que lee la Apología de Sócrates o el Banquete, que se preocupa por los animales, que admira cuando alguien comparte lo suyo con los necesitados; pero si yo voy donde mi pareja y le digo: "Mira qué bonito esto que dice Sócrates en el juicio y también mencionan al Oráculo de Delfos" o "Mira que interesante una reflexión profunda acerca del Amor en el Banquete", y me contesta: "Qué aburrido, mejor vamos a ver una película" o "¿que haces leyendo eso? vamos a comprar algo".

Eso parece una tontera, y que seguramente alguna vez nos ha ocurrido, lamentablemente es lo que va matando poco a poco el amor. Todos tenemos aspiraciones. ¿Sé de verdad cuál es el sentido de la vida de esa pareja que está delante de mí, si le interesa sólo el dinero, o quiere salir adelante en su profesión,o quiere crecer como humano desarrollando más virtudes?.

Los errores que matan al amor no aparecen de repente. Son como el agua que va horadando la piedra: lo dejamos pasar sin darle importancia y, finalmente, hay un momento que la situación ya está quebrada. Nos cuesta aceptarlo y sentimos miedo. Ese miedo nos lleva a lo que se llama, por ejemplo, las "postas"; es decir; no termino con alguien pero ya empiezo con otra persona. ¿Infidelidad?. No hay definición en lo que sentimos. Que pueda pasar el enamorarse de otra persona en determinado momento, sí, es posible. Pero, por lo menos, tener cierta claridad, honestidad, para con la otra persona.


Aceptar nuestras diferencias

Es interesante ver a las parejas cuando son de temperamentos diferentes. Uno dice: "Pero si ella es alegre y él es callado, casi ni habla. ¿Cómo se pueden llevar bien?." Justamente por eso es que viven juntos, porque cada uno pone un aspecto o matiz a la relación.

No hay que sorprendernos por las diferencias de temperamento; al contrario, enriquecen. Así, mientras uno pone el entusiasmo, la otra persona pone la calma; uno es impulsivo, el otro es más reflexivo. Son cosas que se van a ir compartiendo.

Pero, insisto, esas no son cosas que se descubren de un día para otro. Se descubren con el paso del tiempo. ¿Que habrá momentos en que estaremos ofuscados? Seguramente, porque no somos perfectos. Pero, si más allá de estar ofuscados, está el amor, eso pasará, porque comprenderemos que es un momento circunstancial, que son estados de ánimo que pasarán. Les recuerdo ahora que el amor no es algo de la noche a la mañana, el amor se trabaja, se construye.


Cultivarnos a nosotros mismos

Estar junto a otro ser humano es un prodigio, especialmente en esta época, pero tenemos que intentarlo. Vale la pena. Para eso necesitamos elementos, cultivar nuestra vida, cultivarnos a nosotros mismos, para que una relación funcione. Es como si no me hubieran enseñado nunca a leer y me pusieran todos los periódicos juntos. No puedo leer. Eso es lo mismo: ¿Cómo voy a cultivar mis sentimientos, cómo voy a cultivar mis relaciones humanas, cómo voy a cultivar mi relación de pareja, si no he aprendido, si no he estudiado, si no me he cultivado?

Hay una necesidad de cultivarnos, trabajar sobre nosotros mismos, sobre lo que estamos buscando y no engañarnos, es parte de conocernos a nosotros mismos. A veces somos muy permisivos, permitimos determinadas cosas, se dan por aceptadas. Entonces si las aceptamos, no nos tenemos por qué quejar; y si no nos gusta, habría que buscar la forma de solucionarlo.


Algunas conclusiones

Los griegos como Platón y Sócrates, entendían que el hombre naturalmente era un filósofo. Todos nosotros, aunque no hayamos estudiado filosofía, nos preguntamos: ¿Qué es la vida?, ¿qué es la muerte?, ¿de dónde vengo?, ¿por qué me enamoro?, ¿por qué me desenamoro?, ¿por qué siento esto?, ¿por qué quiero esto?, ¿por qué me peleo?, ¿por qué tengo vergüenza?, ¿por qué soy tan tímido?, ¿qué es el amor? Entonces, si naturalmente somos filósofos, ¿por qué no nos interesamos de verdad en eso?

Cuando queremos ganar más dinero o ser mejor calificados, seguramente estudiamos una profesión, una Maestría, un Doctorado. Ponemos un gran esfuerzo en eso. Le dedicamos gran parte de nuestra vida. ¿Por qué no dedicamos una parte del tiempo a cultivarnos a nosotros? Claro, eso no nos dará dinero, pero nos brinda seguridad interior, claridad en nuestros pensamientos, claridad sobre lo que quiero hacer en la vida, perspectiva para analizar una situación; me vuelvo un poco más sincero conmigo mismo, sincero con los demás. Si tengo un problema, lo sabré enfrentar con madurez y coraje, me daré cuenta si mantengo relaciones sentimentales poco fructíferas para mí y sabré terminar con eso. ¿Acaso no vale la pena?.

Yo creo que vamos a ser mucho más felices o, al menos, no nos va a sorprender la vida. Y cuando no tenga claro qué hacer, recurriré a alguien que sepa para que me conduzca, para que me indique. Como cuando no sabemos resolver un problema de matemática, ¿a dónde vamos? A un profesor de matemática, es lógico. Si tenemos un problema médico, ¿a dónde vamos? A un médico. Si tenemos un problema de criterio, claridad, discernimiento; y eso nos da la filosofía.

En la filosofía de la India se habla del ave "Kalahamsa". Es un cisne negro que tenía la propiedad de separar la leche del agua. La leche era el símbolo de lo espiritual, y el agua de lo material. Esta ave era el símbolo del discernimiento, de la capacidad de separar lo superfluo de lo trascendente, era la expresión de la inteligencia, el ser capaz de decir: "esto está mal, esto está bien y me voy a orientar por aquello que está bien", "esta relación de pareja no me hace bien, es difícil, es conflictiva, mi pareja no es educada, mejor busco otra que me haga bien".

Hay que buscar cosas que valgan la pena, que nos ennoblezcan la vida. Si soy un médico, que ennoblezca mi labor de médico. Si soy un abogado, que ennoblezca mi labor de abogado. Si soy obrero que ennoblezca mi labor de obrero. Sea cual sea mi ocupación, que ennoblezca mi ocupación. Yo creo que de esa manera vamos a ser inmensamente felices y, si alguna vez nos dicen que ya no nos quieren, por lo menos estaremos satisfechos y nos iremos contentos porque sabemos que hemos amado, con todo el corazón, con todas las ilusiones y que hemos sido nobles.

Yo estoy seguro, absolutamente seguro, de que nuestro amor por una pareja, nuestros enamoramientos, estarían más ennoblecidos, más unidos. ¿Por qué no intentarlo? Después de todo, lo que les estoy contando no es algo mío, es algo que aprendí desde muy joven cuando recién empecé a coger estos libros de filosofía y me empezaron a dar clases, y seguramente en el camino cometí errores, pero ahora hay que enseñarle a otros para que no cometan esos errores, y para que caminen mejor por esta ruta de la vida que uno tiene que recorrer.

No desperdiciemos nuestra vida. Hay que plasmar estos sueños, que son los sueños de todos, son los sueños de los hombres, querer hacer un Mundo Mejor, de hacer un mundo más justo. El sueño de poder encontrar una dama con la cual uno pueda compartir, luchar y las damas poder encontrar un caballero con el cual también sentirse acompañadas; que puedan recorrer cominos juntos, vivir las aventuras de la vida, aventuras de riesgo, de decir: "Nos vamos a atrever a esto, vamos a confiar en esto, vamos a tener un ideal, vamos a tener pensamientos nobles, vamos a fundar una organización que ayude los animales, vamos a ayudar a la humanidad"

Espero que puedan llevarse aunque sea una pequeña parte de ese esfuerzo que hacemos siempre nosotros acá, los filósofos de Nueva Acrópolis, por tratar de darles un poco de esta esperanza, de esta lucha y de este trabajo para tratar de ser mejor, de ser nobles y de hacer un mundo mejor.

Adaptado de: "Errores que matan al amor" - Profesor Salomón Acosta (Nueva Acrópolis)

1 comentario:

  1. La verdad es muy interesante todo esto que has colocado en tu Blog.. gracias se qe nos servira de mucho a mi y a mi pareja (y a todos los q puedan leer este blog); la verdad muchas veces pasa que los gustos en las parejas no coinciden pero creo q eso debe comprenderse cada quien es diferente .. y bueno esa es su escencia por dcirlo asi .. no se puede buscar cambiar a nadie .. es bueno Acptar esas pequeñas diferencias.. Saber escuchar y comprender; .. la comunicacion es base en toda relacion .. y bueno sobre todo algo:
    Antes de ser pareja siempre se busca ser primero .. el amigo de aqella persona.. sin embargo... aveces el fracaso en toda relacion .. es q creen q cuando la otra persona da el "si , claro q quiero ser tu enamorada(o)" dejan por completo de ser los amigos q eran esos q se cuentan todo...
    y bueno con el tiempo e comprendido
    q si eres Novio tmb con mucha mas razon siguen siendo amigos! no dejen de serlo jamas!
    El q sean enamorados no significa q ya no pueden ser amigos... todo lo contrario .. es cuando mas sinceros deben ser el uno al otro .. bueno .. es todo .. jiji .. y felicitaciones .. Moises
    =D... Atte. Tu amiga Geraldine

    ResponderEliminar